JAIME GARZÓN por Sebastian Agredo


JAIME GARZÓN

 Jaime garzón, un periodista, que por su gran versatilidad se ganó la admiración de la mayoría de los colombianos en algún momento. Por medio de su humor y carisma decía las verdades en cuanto a la corrupción del gobierno y en cuanto a las injusticias del gobierno hacia el pueblo y todos los problemas de la sociedad. Representaba diferentes personajes de la vida pública.

Él estaba con el pueblo y sentía sus dificultades, él estaba contra las corrupciones del gobierno, como los engaños, las promesas falsas, el compro de votos, etc. Era un hombre luchador, líder del pueblo, que defendía todos y cada uno de sus derechos, como salud, educación, etc.

Jaime Garzón fue también un abogadopedagogo, humorista, activista, actor, filósofo, locutor, periodista y mediador de paz colombiano. Tras su trabajo en televisión y en radio también fue un negociador de paz, además de haber obtenido cargos públicos en la alcaldía de Sumapaz. Al entrar en los medios, como televisión y radio lo haría un personaje reconocido y también uno de los primeros en el humor político en el país. Con frases como: “Éste país se escandaliza porque uno dice hijueput* en televisión, pero no se escandaliza cuando hay niños en la calle limpiando vidrios y pidiendo limosna”.  Con frases como ésta, llamó la atención del pueblo colombiano y haciendo caer en razón a muchos en el país es tanto que aún hoy en día lo recordamos como una persona luchadora y valiente que pensaba que nuestro país podría cambiar para bien en algún momento. Actuando con honestidad a la hora de actuar y la verdad con el humor como arma principal éste hombre fue uno de los más trascendentales en la década de los 90´s.

El pueblo colombiano recuerda a Jaime Garzón Forero como un humorista crítico, pero su aporte a la sociedad Colombiana trasciende esta labor:

- Su faceta política.
- Su compromiso con la justicia social y económica.
Sus cualidades que los colombianos aprendimos de este gran hombre

 También, estaba en contra de la educación que tenemos en el país, él pensaba que nada de lo que nos enseñan en las escuelas y colegios de hoy en día nos servía para nada, que teníamos que quitarnos la venda de los ojos y ver la verdad en la que está sometida nuestra Colombia, por la corrupción, por el robo, porque los políticos y senadores de nuestro país no hacen nada en la cámara del senado, Jaime Garzón estaba muy interesado en el pueblo, y en que reaccionara lo antes posible, porque él sabía que cuando el pueblo se levantara que acabaría el juego del gobierno y toda la injusticia económica y educativa que hay.

Por medio del humor, nos enseñó que podemos lograr hacer caer la injusticia, si no lo proponemos, y que debemos enfrentar nuestros problemas con una sonrisa, ya que debemos estar agradecidos con los problemas que tenemos porque de los errores se aprende, cada problema, y cada error que cometemos es una lección más de vida.

“Nosotros nombramos funcionarios públicos es para que le funcione al público- y terminamos haciéndoles venias. Es absurdo”. Ésta es una de sus frases más celebres, en la cual nos transmite un mensaje que dice que los políticos y el gobiernos nos sirven a nosotros, el pueblo colombiano, pero nosotros simplemente lo que hacemos es rendirles culto y alabarlos por toda mala decisión que toman en el gobierno .

“El problema es que nosotros los colombianos no tenemos conciencia colectiva. Tenemos una posición cómoda e individual ante la vida”. Otra gran frase en la que encontramos que Jaime Garzón nos dice que debemos tener conciencia colectiva, y salir de esa burbuja de confort que tenemos todos, salir de eso y pensar todos como un pueblo unido.

“Si ustedes los jóvenes no asumen la dirección del su país, nadie va venir a salvárselo. ¡NADIE!”.  Para mí, la mejor frase que pudo dejar un hombre tan transcendental como Jaime Garzón, es una frase para las generaciones que vienen, en la cual nos dice a los jóvenes que debemos tomar la dirección de nuestro país, nosotros, como un pueblo unido, y no seguir dejando que el gobierno haga lo que quiera con el futuro de nuestro país, ya que si el pueblo se levanta se acaba el juego.

  
Jaime garzón, con una vestimenta poco elegante y una caja para embolar zapatos,  ha sido la inspiración para muchos jóvenes, jóvenes que se han empezado a preguntar el por qué vivimos así, porque el gobierno es corrupto o dónde está todo el dinero que nos pide en gobierno mediante impuestos o todas las exportaciones de petróleo y demás cosas, ¿dónde está? 

Pienso que él ha sido de las personas más importantes a lo largo de la historia de éste país, no sólo con lo que logró hacer mientas estaba con vida, si no lo que logra inspirar en todos los colombianos, a no tener miedo de los políticos, que si nos levantamos todos, el pueblo, podemos vencer la corrupción que hay en éste país, y podemos llevarlo mucho más lejos de lo que está, si nos empezamos a fijar en los recursos naturales y no en los artificiales, si exigimos una educación propia para nuestra época, que dejen de enseñarnos cosas que no nos sirven para nada, y empiecen a enseñar la verdad de la sociedad, si los profesores de ésta y las siguientes épocas educan a los jóvenes de las generaciones futuras con la verdad de éste país, Colombia podría llegar muy lejos y salir de ese poso de corrupción en el cual ha estado metido durante muchísimos años.

Para finalizar, bajo mi opinión, creo que Jaime Garzón fue un hombre brillante, valiente y luchador, del cual debemos aprender. Todo lo que él hizo, todo lo que logró fue para nosotros, para que el pueblo se diera cuenta que si se puede encontrar la manera de salir de la situación que tenemos en el país. No solo Colombia, EL MUNDO necesita más personas como Jaime Garzón. 


Comentarios

  1. Jaime Garzón era como un niño, porque tenía unos sueños grandes, así como todos los niños y la dura realidad de Colombia no los había olvidado sino que por el contrario, los había hecho más fuertes. Como los niños Jaime Garzón opinaba abiertamente, con la verdad sin decir una sola mentira, sin medir jamás las consecuencias y al igual que a los niños, toda injusticia que se presentara lo afectaba.
    No había una causa que no mereciera su pasión ilimitada, su trabajo constante y su poder de
    convocatoria.
    Poco a poco Garzón se fue convirtiendo en el eje de la conciencia crítica de la vida colombiana, es decir con malicia y buen humor. El iba más allá que todos los demás y llamaba a las cosas con nombre propio, el también se burlaba de todos y a todos los despojaba sin piedad. El no calculaba absolutamente nada, pero
    sobre todo él creía que era posible hacer las cosas y despreciaba a quienes se daban por vencidos, y a quienes creían que la cosa no era con ellos.

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